miércoles, 7 de julio de 2010

El Teide a vista de abeja

SENDERO nº 20 o SENDERO VOLCAN DE FASNIA
Domingo 30 de Mayo de 2010.






Bonito nombre para una ruta muy bien organizada entre Tenerife Rural, La Casa de la Miel, y El Parque Nacional del Teide.
La subida
Salimos de La Laguna por la Esperanza. En la subida, y a vista de guagua, vamos encontrando en los bordes de la carretera la jara blanca (Cistus Monspeliensis), con flor más pequeña que la rosada; el sistema fayal brezal, laurisilva mezclada con pinar y también con eucalipto, y por fin el pinar.
El codeso de monte (Adenocarpus Foliolosus) está en plena floración (amarilla) y al borde del pinar empieza a hibridarse con el Codeso de cumbre (Adenocarpus viscosus).














La jara rosada (Cistus Symphityfolius), sensible a la alteración de su habitat y dentro del Catálogo de Especies Amenazadas de Canarias, aparece a mayor altura, prácticamente cuando ya estamos en el pinar. También en alguna pared rocosa encontramos el Gongarillo Canario (Aichryson laxum) (único verode anual de floración amarilla). Salpicada de vez en cuando aparece la salvia de monte

Menos el eucalipto, todas las demás plantas son endemismos canarios.
En el camino, con la Caldera de Pedro Gil a la izda, Natalia y Cristina, dos estupendas guías del Parque Nacional del Teide, nos van mostrando y explicando todo lo que encontramos a nuestro paso:
Desde esos montoncitos de aguja de pino (pinocha) que parece haber arrastrado el viento y sin embargo, ha sido rastrillada por manos humanas (pinocheros) y está en espera de que la carguen y lista para llevarse.
Nos identifican la vegetación que vamos encontrando y nos hablan del aprovechamiento en el pasado de los pinos para resina, que en un principio se realizaba quemándolos en hornos de brea hasta que se prohibió y se empezó a obligar a “sangrar” el pino para obtener la resina. De ahí viene el nombre de “pino breado” al que llevaba ya la cicatriz del sangrado.
Hay zonas en las que el pino ocupa el piso climático de la laurisilva y lo vemos cargado de líquenes (barbas de viejo) del exceso de humedad ambiental continua, a la que está más adaptada la laurisilva debido a la bruma del mar de nubes.
Las guías del Parque Nacional desde luego nos dan una estupenda explicación geológica y vulcanológica, pero eso lo dejo para otra vez. (Ver Nueva Geografía Canaria Vamos dejando atrás el mar de nubes, que en verano suele situarse a una altitud de 500 m. (desde marzo) mientras que en invierno sube hasta los mil metros (según Dña Mª Victoria Marzol,
"la Dama de las Brumas", como yo la apodé y “Lady Fog” como la apodan sus amigos, profesora de titular del Dpto. de Geografía de la ULL y Premio de Investigación Agustín de Bethencourt 2003 por su trabajo: La captación del agua de la niebla en la isla de Tenerife. Atrapando niebla






























Como apenas pude tomar fotos por la guagua en movimiento os recomiendo un espectacular reportaje fotografico sobre las nubes en esta pagina: >Las cumbres florecidas sobre el mar de nubes - La Palma.

Por Fin llegamos al comienzo de la ruta.

El sendero empieza en el Corral del Niño y viene marcado con el nº 20






























Aquí teneis el folleto completo con la 
Red de Senderos, editado por la RED DE PARQUES NACIONALES. Es un gran desplegable muy bonito y merece la pena verlo. Os lo entregan en el centro de visitantes.
Se trata de un recorrido de dificultad baja, de 7.166 m. y desnivel 145 m.
El primer tramo del sendero discurre por el antiguo camino carretero o forestal de Fasnia.
Empezamos bordeando la Montaña de la Carnicería, que es la que se ve al fondo del grupo, y cruzamos entre las montañas de Abreu y las Vacas.

Después descendemos hacia el Llano de los infantes y nos acercamos al volcan de Fasnia, de intenso color negro que entró en erupción en 1705, el día de Reyes.

Bordeamos el volcán y el sendero continúa hasta la carretera TF-21 en el desvío de acceso a los observatorios de Izaña, donde termina la ruta.
Durante el trayecto vamos viendo los preciosos contrastes de colores de la “tierra” desde el rojo oscuro hasta el negro, que corresponden a los distintos grados de oxidación que sufre del Manganeso con el tiempo, siendo, en general, las lavas más oscuras las más jóvenes.
Otras montañas, como La Montaña Blanca, está formada por un cúmulo de lapilli o piedra pómez, que se formó a partir de lava gaseada a gran presión y baja temperatura, expulsada con violencia en las erupciones y que al expansionarse y solidificarse se transformó en material esponjoso, muy ligero.

Y ahora, en una nueva entrada, nos vamos ya a la flora.

2 comentarios:

  1. Prometo completar la entrada y me faltan por meter todas las fotos de plantas. Gracias. Ana

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  2. Es un muy buen trabajo Ana.
    Felicidades.

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